Bueno pues si....37, nada menos que 37....sonaria fatal si no fuera por lo bien que me encuentro, pero es cierto que a estas alturas de la jugada ya no es tan facil recibir los años con una sonrisa, siempre queda el regusto de....otro que se escapo...

Reconozco que me gusta la vida, y cada año para mi en la actualidad es un regalo valioso, un vaso de agua fresca que me quiero beber de un trago, pero que no se acabe nunca...

En estas edades complejas en las que algunos nos toca vivir, la vida nos ha enseñado a dudar de las convicciones y convenciones y a buscar una sola cosa simple y compleja a la vez... Vivir feliz.

Cada vez me refugio mas en las cosas de verdad y huyo de aquello que no me convence, cada vez tengo menos paciencia, disimulo peor; no quiero perder ese tiempo precioso que se me escapa tan rapido con aquellas historias de la vida que se que no son lo que deben de ser para hacerme feliz... Que ya decia mi abuela, mejor solo que mal acompañado.

Los amigos se reducen y fortalecen, las aficiones se centran y profundizan y empiezan a abundar esos momentos de verdad que se atesoran en la historia personal... será que se aprende a vivir?